Estados Unidos no deja de sorprender a sus habitantes -principalmente a los cristianos- por sus recientes decisiones… La Corte Suprema de Oklahoma está ordenando al estado que quite el popular monumento de los Diez Mandamientos de su capitolio.

El alto tribunal dice que el monumento viola la prohibición constitucional del estado contra el uso de fondos o propiedad pública para beneficiar a una religión.

Grupos de satanistas autoproclamados y un ministro bautista celebraron la decisión de la Corte.

«No me opongo a los monumentos a los Diez Mandamientos. Simplemente me opongo a que los coloquen en propiedad del gobierno, porque creo que el gobierno debe ser neutral», dijo a KOCO, Bruce Prescott, el ministro bautista y una de las personas que presentó la demanda en contra del monumento.

Karen Monahan, una residente de Oklahoma, expresó una fuerte oposición hacia la decisión y le dijo lo siguiente a KOKH-TV, afiliada de CNN: «No voy a aceptar esto como la decisión final».

Por su parte, el reconocido evangelista Franklin Graham se manifestó a través de las redes sociales en contra del fallo.

«Estamos viviendo en un tiempo en que nuestro país no solo está desafiando descaradamente las leyes de Dios, sino que está tratando de eliminarlas por completo de la vista pública. Solo piense qué diferencia habría si nuestros niños hoy en día aprendieran sobre los Diez Mandamientos y del Dios que los escribió», escribió Graham.

Algunos legisladores estatales también arremetieron contra el fallo y anunciaron que tienen pensado tratar de revocar la sección de la constitución del estado que la corte mencionó en su decisión. El proceso de enmiendas de Oklahoma establece que una votación a nivel estatal a la larga podría decidir el asunto. [Fuente]