Barack Obama dejó como legado una sociedad dividida en los Estados Unidos y totalmente vulnerable a las demandas de los grupos de izquierda, la mafia gay y a la persecución religiosa y libre discurso. En febrero de este año, Donald Trump dió por terminada la ‘Ley de baños transgénero’  pero sus consecuencias siguen vivas, tal es el caso de Nueva York, donde se instalarán baños extra para la comunidad transgénera.

Al menos no pueden usar el baño que quieran, ¿no?, ésto mínimamente otorga un poco de tranquilidad a las niñas, sabiendo que no cualquiera puede usar el baño de mujeres con la excusa de que ‘así es como se sienten’ (ya se han reportado abusos gracias a esta excusa).

El objetivo es que la comunidad trans tenga «privacidad».

Con el objetivo de brindarles «privacidad» a los estudiantes transgénero de la ciudad de Nueva York, las autoridades instalarán un tercer baño para este sector en todas las escuelas.

De acuerdo con el Departamento de Educación, la primera fase del proyecto estará terminada en junio de este año, mientras que los edificios restantes contarán con el nuevo espacio hasta enero de 2018.

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«Queremos asegurarnos que todos los estudiantes tengan la privacidad adicional que necesitan y que tengan acceso a un baño que se alinee con su identidad de género», dijo la canciller del DOE, Carmen Fariña.

Según Fariña, los alumnos se sentirán más seguros y esto reducirá las cifras de depresión, ansiedad y abuso de sustancias de la comunidad LGBTI. [Fuente]