Al igual que muchos países de Europa, Uruguay ha puesto un límite de U$S 5.000 para pagos en efectivo cuando se compre un inmueble o un automóvil, quizás no parezca un dato muy interesante o importante, pero lo es.
Medidas de este tipo son el primer paso para que se empiece a restringir el uso del dinero en efectivo, dentro de poco ese monto se irá reduciendo hasta que todas las compras sean realizadas por medios digitales.
Vamos camino a la ‘cashless society’.