En el Evangelio de Marcos, hay un relato intrigante de cómo Jesús curó a un ciego en un proceso de dos pasos:
«Vino luego a Betsaida; y le trajeron un ciego, y le rogaron que le tocase. Entonces, tomando la mano del ciego, le sacó fuera de la aldea; y escupiendo en sus ojos, le puso las manos encima, y le preguntó si veía algo. El, mirando, dijo: Veo los hombres como árboles, pero los veo que andan. Luego le puso otra vez las manos sobre los ojos, y le hizo que mirase; y fue restablecido, y vio de lejos y claramente a todos.» Marcos 8: 22-25.
Los cristianos que creen en la Biblia no tienen ningún problema con este milagro, ya que la Biblia presenta al Señor Jesucristo como Aquél que, al principio, creó el universo y todas las cosas en él, incluida la vida humana, por el poder de Su Palabra (Génesis 1; Juan 1: 1–3; Colosenses 1:16). El Señor que pudo hacer lo uno ciertamente puede hacer lo otro. La única pregunta que surge es por qué la cura se realizó en dos etapas en lugar de solo una.
En la Creación, Dios no necesitó millones de años: cuanto mayor es el poder, menor es la necesidad de tiempo. Pudo haber creado todo en un instante, pero eligió tomarse seis días por una razón –«Acuérdate del día de reposo para santificarlo. Seis días trabajarás, y harás toda tu obra; mas el séptimo día es reposo para Jehová tu Dios; no hagas en él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu criada, ni tu bestia, ni tu extranjero que está dentro de tus puertas. Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, el mar, y todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto, Jehová bendijo el día de reposo y lo santificó.» Éxodo 20: 8–11.-
Del mismo modo, Jesús podría haber sanado a este hombre en un solo paso, como lo hizo con todas las demás personas ciegas que curó, pero en esta ocasión decidió tomar más tiempo. Los dos pasos fueron solo unos pocos momentos, no meses, por lo que no hubo tiempo para que ocurriera la ‘curación natural’, y los detalles brindados muestran que no se trató de un alivio de la ceguera psicosomática o ‘histérica’ (ver más abajo).
El hecho de que Jesús tomó dos etapas no significa que se haya limitado a algunos medios no sobrenaturales para hacer su milagro creativo. Tal vez fue para que pudiéramos ver una prueba de inspiración a través de los detalles médicos proporcionados por el escritor humano, Marcos, pero de los cuales posiblemente no podría haber sabido la importancia, detalles que fueron similares a los experimentados por las personas mencionadas a continuación.
Virgilio
Virgilio era un hombre de 50 años, ciego desde la infancia, cuya vista fue restaurada en 1991 después de que se extrajo una catarata y se implantó una nueva lente en un ojo. Oliver Sacks, profesor de neurología en el Albert Einstein College of Medicine, de Nueva York, cuenta su historia en su libro An Anthropologist on Mars. 1 Cuando se retiraron las vendas, Virgilio pudo ver, pero no tenía idea de lo que estaba viendo. La luz, el movimiento y el color estaban todos mezclados y sin sentido; todo se veía borroso. Su cerebro no podía entender las imágenes que transmitía su nervio óptico. Aunque ahora tenía vista, todavía estaba mentalmente ciego, una condición de incapacidad perceptiva conocida médicamente como agnosia. Seguir leyendo Árboles que caminan →